HAY DIAS EN LOS QUE SIMPLEMENTE QUIERES SALIR CORRIENDO…
Hay días en los que siento un peso en el pecho, una tristeza que me acompaña sin una causa aparente. No ha pasado nada grave, no hay una razón concreta, pero siento un vacío que no puedo explicar. Son momentos en los que todo parece cuesta arriba, y aunque intento continuar con mi rutina, algo dentro de mí me dice que hoy simplemente no puedo con todo. Y aprendí que está bien. Porque no todos los días tienen que ser perfectos, y no siempre tengo que entender el porqué de mis emociones. A veces, solo necesito darme el espacio para sentir, para soltar, para aceptar que estos momentos también forman parte de la vida.
¿Por qué me pasa esto?
No siempre hay una razón evidente para la tristeza. He notado que puede ser una acumulación de estrés, cansancio emocional, cambios hormonales o incluso la falta de descanso.
Lo que me ayuda en esos días: Cuando la tristeza aparece sin previo aviso, hay pequeñas cosas que me ayudan a atravesarla con más calma:
Ese día decidí hacer algo diferente: salí a caminar sin rumbo, puse una playlist que me traía buenos recuerdos y me senté en un parque a respirar.
Frases que me sostienen
-
No todos los días son buenos, pero siempre hay algo bueno en cada día.
-
Las tormentas también pasan, y después de ellas, el cielo se ve más claro.
-
Permítete sentir, pero no te quedes atrapada en la tristeza.
Un reto para mí (y para ti si lo necesitas)
Esta semana quiero regalarme una actividad que me traiga calma. Algo en solitario: un paseo, un momento de lectura, una pausa consciente.
Y si tú también lo haces, cuéntamelo en los comentarios. Me encantará leerte.
Would you like to read this article in English? Click here:
Comentarios